1.Es la técnica que ha conseguido, hasta el momento, los mejores resultados en la predicción de esta patología y

2.Porque con 4 meses de edad ya permite determinar, mediante el cálculo de un Índice de Distracción (ID), esta predisposición. Esto permite actuar con medidas preventivas que minimicen las consecuencias de la Displasia de Cadera, así como aplicar unos programas de Control Genético de la enfermedad, más efectivos.

Ch. Aneto con "40" días. Aun no se le puede aplicar el Penn-Hip Foto Binimeler

Ch. Aneto con 5 meses. Según el Penn-Hip (A,A) Foto Binimeler

En 1994, Gail K.Smith, desarrolló y puso en práctica una técnica radiográfica para establecer precozmente (4 meses de edad)la susceptibilidad de un cachorro a padecer la displasia coxofemoral, a partir de una valoración cuantitativa de la "Laxitud Articular" y su correlación con la Osteoartrosis. Desde entonces, dicho método de Distracción, conocido popularmente como Penn-Hip, se ha implantado progresivamente en los centros veterinarios de todo el mundo representando, gracias a la precocidad de su diagnóstico y a su elevada especifidad, una valiosa herramienta en el control de la Displasia de cadera y en la posibilidad de instaurar un tratamiento quirúrgico preventivo.

La técnica radiográfica de distracción requiere que el animal esté profundamente sedado (o bajo anestesia general)y colocando en decúbito supino con las caderas en normoflexión. Con el perro en esa posición, se llevan a cabo dos proyecciones radiográficas, (Ver figura 1) una de Compresión, con las cabezas femorales perfectamente ubicadas en el interior de los acetábulos y otra de Distracción, separando al máximo las cabezas femorales con la ayuda de un distractor que se sitúa entre ambas piernas, a la altura de la región ventral de la pelvis (Smith y col..., 1990).

A partir de estas dos posiciones, G.Smith y sus colaboradores desarrollaron un nuevo método para cuantificar el grado relativo de desplazamiento que experimentaba la cabeza del fémur en la proyección de Distracción, con respecto a la de Compresión. Este método cuantitativo determina un Índice de Distracción (ID), obtenido tras dibujar sobre la radiografía de compresión y distracción unos círculos que se encajen sobre el acetábulo y sobre la cabeza del fémur y aplicar la fórmula ID:d/r.Siendo "d" la distancia entre el punto central de la circunferencia femoral en posición de Compresión y ese mismo punto en posición de Distracción y "r" el radio de la cabeza del fémur(ver figura 2). Por tanto, los valores de ID oscilan entre 0 y 1, siendo "0" una cadera completamente Congruente, tal, y como correspondería a la de una proyección en compresión y "1" la máxima laxitud articular, que correspondería a una proyección en Distracción de unas caderas virtualmente luxadas. El Índice de Distracción indica una escala proporcional, de manera que una cadera con un ID de 0.6º muestra el doble de laxitud que una con un ID de 0.3º.

El interés en determinar la laxitud articular se basa en la posibilidad de correlacionarla con la Osteoartrosis (OA). Para confirmar este aspecto se llevo a cabo un estudio cruzado entre la laxitud coxofemoral, determinada a partir de la radiografía de distracción, y la apariencia radiográfica de la osteartrosis en una muestra de 227 perros de raza grande o gigante y de 28 meses de media de edad (Smith y col.1995). De este estudio se puede concluir que:

1. Las caderas sin laxitud articular presentan muy pocas posibilidades de desarrollar OA.

2. A medida que aumenta la laxitud se observa un incremento asociado en la probabilidad de desarrollar OA.

3. Ninguna cadera con un índice de Distracción inferior a 0,3º mostró signos radiográficos de OA.

4. No todos los perros con un ID superior a 0,3º mostraron signos de OA.

5. Por tanto, existe una elevada correlación entre la laxitud articular cuantificada mediante el ID y la posibilidad de desarrollar OA.

La evaluación de esa misma población de perros mediante la radiografía estándar, mostró también una correlación estadísticamente significativa(aunque muy ajustada)pero no pudo determinarse un umbral de laxitud por debajo del cual no se observarán signos de OA.

Cabe destacar igualmente que, con este método, estamos cuantificando la laxitud articular del animal anestesiado (laxitud pasiva)que no tiene porque coincidir con el grado de laxitud articular que presenta la articulación de la cadera cuando el perro camina o corre (laxitud activa o funcional)y que será la responsable de desarrollar la OA. Hay que tener en cuenta también que un perro sin laxitud pasiva tampoco presentará laxitud activa y un perro con laxitud activa presentará indefectiblemente una laxitud pasiva. Aunque la laxitud funcional es la que presenta un mayor interés clínico, hoy por hoy no es posible cuantificarla.

Ch. Aneto con 3 años (A,A)
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El establecimiento del valor 0,3 como supuesto umbral biológico entre las caderas normales y las susceptibles de padecer OA se reforzó con los estudios comparativos del nivel de Distracción entre perros de razas que, habitualmente padecen displasia coxofemoral (Pastor Alemán, Golden Retrievers y Rottweiller) y perros de razas, como los Borzois y los galgos, con una frecuencia de displasia coxofemoral inferior al 1%. Este estudio demostró que la media de laxitud pasiva de los perros pertenecientes al grupo de razas no predispuestas era, con una diferencia estadísticamente significativa, muy inferior al de los perros de razas predispuestas, cabe destacar que, a partir de los datos registrados en el citado estudio, el 98% de todos los Borzois y Galgos tenían un Índice de Distracción inferior a 0,3, siendo en algunos casos de hasta el 0,08. Por el contrario, no se obtuvieron diferencias estadísticamente significativas en cuanto a la laxitud articular, cuando se compararon ambos grupos de animales con la proyección radiográfica estándar.

La comparación entre los resultados obtenidos, tras valorar radiografías de 65 perros de raza grande con la técnica radiográfica de distracción y con la estándar cuantificada mediante la puntuación OFA en siete grados, revela hallazgos muy interesantes. Todos los perros considerados como de Displasia leve, moderada y severa, según la clasificación de la OFA, presentaban unos ID por encima de 0,3 (ID medio: 0,55), lo que demostraba una excelente coincidencia entre ambas clasificaciones en cuanto a la manifestación radiográfica de la enfermedad. En otras palabras, todos los perros considerados como positivos a displasia, según la OFA se incluían, según la técnica de Distracción, en el grupo de hiperlaxitud articular y, por lo tanto, susceptibles de padecer OA. Sin embargo, en los casos menos afectados, según la OFA, no se producía tal coincidencia. De este modo, el 50% de los perros clasificados como de conformación coxofemoral excelente, según el método de la OFA, presentaban ID por encima de 0,3 (ID medio: 0,3, susceptibles de OA). Asimismo, el 66% de los perros clasificados como de conformación coxofemoral buena y el 100% de los perros con conformación límite, presentaban ID superiores a 0,3 (ID medios 0,35 y 0,50 respectivamente). El hecho de que muchos perros (hasta el 71%) supuestamente libres de displasia, según el método estándar y la clasificación de la OFA, presenten un grado de hiperlaxitud articular (valoración con la técnica de Distracción)susceptible de desarrollar OA, podría explicar el escaso éxito de los "rigurosos" programas de selección para reducir la Displasia Coxofemoral tras más de 30 años de su aplicación en los Estados Unidos.

Ch. Aneto con 4 años
Foto Binimeler

1. Existen pocos veterinarios que dominen el método. Nos comentan que este método es "ciencia-ficción" en España e incluso en Europa, ya que si es difícil que los propietarios y criadores radiografíen a los dos años a sus perros para conocer el nivel de HD, es ingenuo pensar que, a los 4 meses y con fines predictivos, utilicen el método Penn-Hip. Sin embargo, desde aquí tenemos claro que los que utilicemos estos métodos de "ciencia -ficción" en estos momentos, ganaremos lustros en la lucha contra la HD, con respecto a los que no utilizan ninguno.

2. El coste del método, a precio de "amigo", es de 120 Euros por Cachorro. El dinero siempre es relativo y depende de la responsabilidad de cada uno. Si un criador está dudando entre dos sementales con fenotipo parecido pero uno presenta un ID de 0,35 y otro de 0,55 (en estos momentos muy probable, ya que el grado de control de la enfermedad, hasta hace un año, ha sido inexistente) el gastar 240 Euros en el método, puede amortizarse en una generación.

3. A pesar de la falta de trabajos similares, comparando la técnica de distracción y la técnica y método de cuantificación de Displasia utilizado en Europa y/o España, probablemente se pueden obtener unas conclusiones similares a las reflejadas por Gail Smith. Es más, probablemente los resultados serán todavía más desfavorables si tenemos en cuenta que los programas de selección y erradicación de la HD, al menos en nuestro país, no son, ni tan rigurosos ni se han aplicado durante tanto tiempo como los utilizados en Estados Unidos. Por ello, la adaptación y generalización del método radiográfico de Distracción, para el diagnóstico precoz de la displasia coxofemoral en España, permitiría un mejor control sobre la Displasia.

4. Con respecto a los estudios de ID en los Montañas, existen datos recogidos sobre una muestra de 75 Montañas norteamericanos. Resumiendo diremos que los Montañas que tenían un ID a los 4 meses entre 0,20 y 0,35, presentaban de adutos caderas libres. De 0,35 a 0,45 aparecían, en edad adulta, animales libres de HD, con HD ligera e incluso HD media. De 0,45 a 0,60 los niveles de HD en edad adulta eran ligeras, medias y severas, e incluso algún B(libre pero...).

Biadós de Alba de los Danzantes (A,A)
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